Mariana Flores juega al fútbol y no esconde su pasión por este deporte. ¿Las particularidades de ser una jugadora amateur? Se las cuenta a HoySeJuegaFem en un mano a mano imperdible. De La Plata hasta Florencio Varela para vestir el verde y amarillo de Defensa Y Justicia.
¿Quién dijo que no se puede empezar de grande a jugar? Mariana es oriunda de La Plata y empezó a jugar hace unos años al fútbol. Esto no la privó de nada y pasó de pisar por primera vez el césped a ser capitana de un equipo como Defensa y Justicia que compite en torneos de AFA. El fútbol amateur brinda toda clase de historias y por eso mismo charlamos con una de las protagonistas.
Villa San Carlos (AFA), For Ever en la liga amateur platense, la selección de la Universidad Nacional de La Plata (UNLP), Defensa y Justicia (AFA) y más. El recorrido de quién ocupa un lugar en la defensa es de admirar. En el centro por derecha o por izquierda. A Mariana le sienta bien esas posiciones aunque también nos ha confesado que le gustaría probar en algún momento un poco más arriba en el campo.
“Somos todas jugadoras amateurs. Tenemos las mismas dificultades. No importa si jugás competencias de AFA o de una liga en particular. Está claro que no tenemos el mismo marketing que en el profesional”, nos cuenta Mariana en relación a la dificultad del día a día. De todas maneras nunca se deja de lado la emoción y sensación de patear una pelota dentro de la cancha. Y esto último es el tan nombrado espíritu amateur.
El fútbol femenino particularmente crece diariamente y así nos lo cuenta ella: “Se puede mejorar dándole más importancia. Hay un presupuesto de AFA destinado a las chicas que jugamos como no profesional”.
“El fútbol es mi pasión, es una forma de vida. Le tenés que poner mucho esfuerzo para organizarte con el trabajo, las ocupaciones, las tareas en la casa. Programamos cada día y eso lo que te mueve, motiva”, nos comenta Mariana para hacernos entender que significa este deporte en su vida. “Sacrifiqué muchas cosas. Te consume mucho tiempo, días y sangre pero también me ha dado muchas satisfacciones, viajes y encontrarme con mucha gente buena. Jugamos por amor a la camiseta y por querer dejar todo por tu equipo”, explica en relación al día a día.
Por último Mariana cerró la conversación con una frase que deja a todos con una sonrisa: “El fútbol sana. Tiene una función social y particularmente lo he vivido”.
Con sacrificio y empuje, las metas se pueden lograr sin importar el tiempo, porque a diferencia que en un partido, acá el sacrificio dura más de 90 minutos.